SERVIMEDIA.- Las mujeres tienen menos probabilidades de recibir reanimación cardiopulmonar (RCP) que los hombres en lugares públicos. Una afirmación que se desprende de un estudio presentado por la enfermera investigadora de doctorado en el centro de investigación del Instituto Cardiológico de Montreal, en Canadá, Sylvie Cossette, quien ha desarrollado esta investigación junto con el médico de urgencias e investigador del Hospital del Sagrado Corazón, Alexis Cournoyer, en el Congreso Europeo de Medicina de Urgencias (Eusem2023).
Algo indudable es que la RCP salva vidas. Estos investigadores lo han recalcado en el mencionado estudio, donde además han instado a toda la población a aprender a realizar esta técnica y aplicarla sin dudarlo a cualquier persona que la necesite en la vía pública, independientemente de su sexo, edad o ubicación. “En una emergencia, cuando alguien está inconsciente y no respira adecuadamente, además de llamar a una ambulancia, los transeúntes deben realizar RCP. Esto le dará al paciente muchas más posibilidades de supervivencia y recuperación“, apunta Cournoyer.
¿Qué factores disuaden de realizar RCP?
“Este estudio se llevó a cabo para descubrir factores que pudieran disuadir a las personas de realizar RCP, incluido cualquier factor que pudiera disuadir a las personas de realizar RCP a una mujer”, explica por su parte Cossette.
Para realizar el estudio, ambos investigadores emplearon datos de registros de paros cardíacos que ocurrieron fuera de hospitales en Canadá y Estado Unidos entre 2005 y 2015, donde cerca de 40.000 pacientes, con un promedio de edad de 67 años, han participado. Así, observaron factores como si un transeúnte realizaba o no RCP, dónde se producía la emergencia, la edad y sexo del paciente. De este primer estudio concluyeron que solo la mitad de los pacientes (54%) recibieron RCP por parte de un transeúnte, y que, en líneas generales, las mujeres tenían ligeramente menos probabilidades de recibir RCP en comparación con los hombres (52% frente a 55% en el caso de los hombres).
Sin embargo, cuando la enfermera y el médico se centraron en analizar estos paros cardíacos ocurridos en un lugar público, como, por ejemplo, la calle, la diferencia fue mayor, 61% en comparación con 68% en hombres. Unos porcentajes en donde solo se ha apreciado una diferencia a la baja por la condición de ser mujer, donde otros factores como la edad y la ubicación no han entrado en juego.
Ambos investigadores también hicieron un análisis de los paros cardíacos que ocurrían en un entorno privado, como, por ejemplo, un domicilio. Aquí los datos indicaron que con cada aumento de diez años en la edad, los hombres tenían alrededor de un 9% menos de probabilidades de recibir RCP durante un paro cardíaco. En este caso, en las mujeres, las posibilidades de recibir RCP eran alrededor de un 3% menores con cada aumento de diez años en la edad.
Contacto físico
Como conclusión, los científicos apuntan al contacto físico como principal factor que disuade a la población de realizar RCP a mujeres en espacios públicos. “El estudio muestra que las mujeres que sufren un paro cardíaco tienen menos probabilidades de recibir la necesaria RCP en comparación con los hombres, especialmente si la emergencia ocurre en público. No sabemos por qué es así. Podría ser que las personas estén preocupadas por lastimar o tocar a las mujeres, o que piensen que es menos probable que una mujer sufra un paro cardíaco”, explica el médico Cournoyer.
Por su parte, la enfermera Cossette afirma que se realizará una ampliación de la investigación para ahondar en este hecho y así poder “comprender qué se esconde detrás de esa diferencia. Y eso podría ayudarnos a garantizar que cualquier persona que necesite RCP la reciba, independientemente de su sexo, edad o ubicación”, concluye la investigadora.