ÁNGEL M. GREGORIS.- Se estima que en España viven entre 70.000 y 100.000 personas con una ostomía y que se realizan, aproximadamente, 16.000 nuevas intervenciones anualmente. Si estos datos los extrapolamos a Canarias, aunque no existen datos actualizados, el Libro Blanco de la Ostomía los cifra en más de 3.000 casos. Contar en todos los ámbitos sanitarios con consultas de enfermería expertas en ostomías es una de las principales reivindicaciones del Consejo General de Enfermería (CGE), que lleva años reclamando la necesidad de regular esta figura para dar la mejor atención a los pacientes, antes, durante y después de la intervención.
A la cola de las comunidades
Canarias, sin embargo, con cuatro consultas y dos de reciente creación, está a la cola de las comunidades, con una ratio pacientes/consulta de 651, muy por encima de la media del país, que se encuentra en 321 pacientes por consulta. Conscientes de las desigualdades de esta situación, el vicepresidente del CGE, José Luis Cobos, se ha reunido, junto a un grupo de enfermeras estomaterapeutas de Canarias, con las direcciones de Enfermería y gerencias de diferentes hospitales y de Atencion Primaria de la comunidad para presentarles el documento “Unificación de criterios de actuación de los cuidados de enfermería a la persona ostomizada en Canarias”.
Este informe, que cuenta con la colaboración de Coloplast, recoge la importancia de unificar la atención a los pacientes con ostomías en todo el territorio, de modo que los afectados no se encuentren con trabas o problemas a la hora de recibir unos cuidados expertos y de calidad. Hasta la fecha, denuncian, existe bastante descoordinación entre consultas y entre las propias islas. “El objetivo es que se adopten una serie de medidas y podamos unificar la forma de atender a los pacientes desde antes de operarse, durante las visitas, el tiempo que están ingresados y tras el alta. Buscamos la equidad entre pacientes”, exponen las enfermeras estomaterapeutas.
Responsables
Tras la reunión, en la que los diferentes responsables de la administración han mostrado su total apoyo a la iniciativa, han destacado también la posibilidad de hacer interconsultas de estas enfermeras expertas para que cualquier profesional pueda consultar con ella en el caso de necesitar ayuda con un paciente ostomizado. Asimismo, se ha adquirido el compromiso de trabajar en esta línea de coordinación entre los distintos niveles asistenciales y poner soluciones a los posibles problemas existentes para su mejor desarrollo.
“La administración debe darse cuenta de la necesidad de estas enfermeras porque mejoran enormemente la calidad de vida del paciente y también de sus familiares. Desde el Consejo General de Enfermería apoyamos la iniciativa, pero ya no solo a nivel de Canarias, sino a nivel estatal. Es una figura coste-efectiva y hay que trabajar conjuntamente para implantarla. De hecho, está demostrado que la intervención de una enfermera experta en ostomías reduce las visitas a urgencias de los pacientes, calma la ansiedad y mejora el proceso de recuperación”, apunta José Luis Cobos.
Objetivos
En definitiva, los objetivos de estas consultas son proporcionar una educación sanitaria sobre el cuidado del estoma y manejo de los dispositivos, dar soporte emocional a la persona ostomizada y su familia desde el preoperatorio hasta su completa rehabilitación, dar información y formación individualizada para conseguir una adaptación saludable y autonomía en los cuidados y, por último, colaborar en la formación del personal de enfermería para el manejo básico de los pacientes ostomizados.
Como conclusión, todos los participantes en la reunión han coincidido en la necesidad de incorporar en la hoja de ruta de la atención al paciente ostomizado las mejoras que sean necesarias para brindar una atención sanitaria de calidad y con criterios de equidad.