REDACCIÓN.- un elevado número de profesionales de las Unidades de Críticos de todos los departamentos de salud de la Comunidad Valenciana han firmado un manifiesto en el que piden un cambio en la selección de enfermeras de críticos en la Comunidad Valenciana, en concreto en el sistema de provisión y selección del personal de Enfermería. Una petición que apoya el Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (Cecova), en nombre de los tres colegios provinciales de Enfermería de Valencia, Alicante y Castellón.
Desde el Cecova se subraya la queja de las/os profesionales de las Unidades de Críticos cuando cuestionan el modelo de provisión y selección actual porque no contempla la formación, ni la experiencia en cuidados críticos, por lo que el personal de Enfermería que accede a trabajar a estas Unidades, de alta complejidad, debe hacerlo sin ningún tipo de formación específica ni experiencia previa.
Dificultades para cubrir vacantes
El Cecova confirma, en todos los términos, las dificultades crecientes que se han producido durante los dos últimos años para cubrir las vacantes en estas Unidades. De hecho, como aseguran sus profesionales, además del reto anual que supone llenar las plazas necesarias en períodos estivales, las necesidades planteadas por la pandemia COVID-19 han evidenciado aún más las deficiencias del modelo. La imperante necesidad de contar con enfermeras formadas en cuidados críticos y la llegada simultánea de numeroso personal sin experiencia, ni formación, a las Unidades de Cuidados Críticos, ha supuesto un grave problema para la gestión asistencial de la pandemia y para el funcionamiento de nuestras unidades. La pandemia ha evidenciado la carencia de profesionales expertos en cuidados críticos y ha demostrado la necesidad de una formación específica.
La necesidad de formar urgentemente a enfermeras/os, mientras se soportaba una elevada presión asistencial ha hecho que el personal de estas Unidades se sienta extenuado. Durante estos años se ha hecho un esfuerzo titánico para intentar formar al personal de nueva incorporación. Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos del personal, el aprendizaje en nuestras unidades necesita de un período largo, con una enseñanza reglada especializada, tal y como expone el informe de la Sociedad Española de Enfermería Intensiva y Unidades Coronarias (SEEIUC): “…mediante la que los profesionales adquieran los conocimientos y habilidades necesarias para prestar cuidados de alta calidad en este campo”. Durante la pandemia, se pusieron en marcha, entre otras, iniciativas como el proyecto C19_SPACE2, promulgado por políticos europeos tras la primera ola de pandemia. Sin embargo, la implementación de estas estrategias ha sido desigual entre los diferentes departamentos de salud e insuficiente, lo que originó que, para poder hacer frente a las carencias descritas, el personal de las Unidades de Críticos tuviera que impartir de forma improvisada formación específica a nuestros propios compañeros.
Incremento de infecciones
Un ejemplo del impacto de la incorporación masiva de personal de enfermería, sin formación, ni experiencia, a las Unidades de Cuidados Críticos durante la pandemia, y del desbordamiento del personal sanitario, puede ser el alarmante incremento de infecciones nosocomiales descrito durante este período (informes ENVIN). Las infecciones fruto de la asistencia sanitaria provocan un aumento de la morbimortalidad en los pacientes, así como un aumento muy elevado de los costes sanitarios. Según los informes ENVIN, a pesar de la menor participación debido a la sobrecarga de trabajo, en 2020 hubo un importante aumento de las infecciones en España comparado los años 2018 y 2019.
Tal y como expresa la Sociedad Valenciana de Medicina Intensiva Crítica y de Unidades Coronarias (SOVAMICYUC): “El personal de Enfermería que trabaja en Unidades de Críticos tiene y debe de estar lo suficientemente preparado como para hacer una asistencia con total garantía de CALIDAD y fundamentalmente con indiscutible SEGURIDAD”.
Sin embargo, el sistema actual de provisión y selección de personal no los garantiza. «Consideramos pues, que el modelo de provisión y selección actual supone un riesgo, tanto para la seguridad del paciente crítico, como para las propias enfermeras que acceden a trabajar a estas unidades», señalan desde el Cecova.