IRENE BALLESTEROS.- Con el objetivo de transformar los hospitales en un lugar de trabajo más saludable, la Unidad de Salud Laboral del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba ha puesto en marcha el programa “Promoción de la Salud en el Lugar de Trabajo”. Para ello, no sólo han dado continuidad a las líneas de trabajo existentes, sino que también han implantado otras líneas de actuación complementarias entre sí con el reto de mejorar la salud y la calidad de vida de la población.
Desde hace años, desde la Unidad de Salud Laboral ya han implantado diferentes proyectos enfocados a cuidar la salud de los profesionales del ámbito hospitalario, pero ahora, con el objetivo de convertir este hospital en una empresa saludable, este equipo ha lanzado un programa en el que pretenden “desarrollar aquellas medidas que mejoren la salud de los trabajadores del hospital y sus familias, influyendo en sus conductas y en el entorno del mismo, promoviendo la obtención de información, el aprendizaje de habilidades y la creación de un entorno de trabajo que permita al trabajador elegir las conductas más saludables, asumiendo un mayor protagonismo en el control de su salud”, explica en el documento publicado, Sonia Repullo, enfermera especialista en Enfermería del Trabajo en el Hospital Reina Sofía de Córdoba, tutora EIR de Enfermería del Trabajo y miembro del equipo líder del proyecto.
El programa presentado pretende complementar y potenciar las líneas de trabajo en prevención de riesgos laborales ya desarrolladas y su integración en el sistema de gestión del hospital, que van desde la alimentación saludable, a un programa de actividad física completo.
Líneas de trabajo
El proyecto está formado por diferentes líneas de trabajo, consultas, programas e incluso talleres. Estos atienden a temáticas de diferente índole, pero que, entre todas, conforman un entorno saludable y apto para un correcto y saludable desarrollo profesional.
Además de contemplar un programa de alimentación saludable y de actividad física, el proyecto cuenta con una consulta de deshabituación tabáquica. La Salud Mental también es otro de los puntos fuertes de este proyecto, donde se destaca la gestión del bienestar emocional y el estrés en el entorno, poniendo en marcha un taller de control del estrés basado en la meditación del personal.
Las enfermedades crónicas también ha sido otro de los temas a tener en cuenta dentro de este programa. Así, se ha puesto en marcha un taller de Escuela de Espalda en el medio laboral con una consulta de atención y seguimiento del COVID persistente, atendiendo patologías cardiovasculares o con consultas de prevención y detección precoz del cáncer de mama, cérvix y colon.
En una población cada vez más envejecida, la gestión de esta problemática dentro de los entornos laborales se hace más que necesario. Así, el proyecto también incluye un programa de gestión del envejecimiento en la empresa, donde se valora la carga física, biomecánica y mental que soportan los profesionales sanitarios en el ejercicio de su profesión. Por último, también se ha puesto el foco en las adicciones, un problema cada vez más creciente entre la población y al que se ofrece un abordaje integral con un programa de actuaciones específico.