REDACCIÓN. – Durante las olas de calor aumenta un 25% el peligro de morir, según datos del Ministerio de Sanidad. El golpe de calor se produce cuando la temperatura del cuerpo llega a los 40 grados, lo que supone unos 4 grados más de la temperatura normal del cuerpo que es de 36 grados. Ante un golpe de calor, los mecanismos que usa nuestro cuerpo para enfriarse como son: la respiración, el sudor y la circulación, dejan de funcionar. Ello nos provoca pérdida de líquidos y otros peligros para la salud.
Es por ello que desde la Asociación de Enfermería Familiar y Comunitaria (AIFiCC), frente a las altas temperaturas del verano, quiere alertar sobre los peligros de sufrir un golpe de calor. Las enfermeras de familia, que trabajan en los centros de salud, inician cuando viene el buen tiempo, una campaña de concienciación a la población a través de consejos que informan sobre la mejor manera de protegernos y evitar un golpe de calor.
Sintomatología
Las personas más vulnerables a sufrir un golpe de calor son los niños menores de 6 años y las personas mayores de 65 años. Los principales síntomas cuando se sufre un golpe de calor son: mareo, confusión y desorientación, enrojecimiento, y sequedad en la piel. Además, la temperatura del cuerpo llega a los 40 o incluso 41 grados. Esto provoca también un ritmo cardíaco rápido, dolor de cabeza que puede llegar a la inconsciencia. También puede ocasionar síntomas como vómitos, convulsiones y problemas para respirar en los casos más graves.
Consejos
Las enfermeras de Atención Primaria recuerdan que durante los días de mucho calor hay que beber bastante agua, aunque no se tenga sed. También recuerdan que hay que protegernos de la exposición directa del sol, y evitar hacer ejercicio físico durante las horas de más calor, de 12 horas a 16 horas.
Aconsejan también permanecer en lugares frescos, a la sombra o climatizados, al tiempo que vestir con ropa ligera, clara y que pueda transpirar, usar gorras y gafas de sol, y una crema con filtro solar con un factor de protección mínimo de 50, que nos pondremos cada día antes de salir de casa y que se debe poner cada 2 horas para que sea eficaz y protegernos mejor del sol.
En caso de que se produzca un golpe de calor, la AIFiCC recomienda en primer lugar llevar a la persona que lo presenta a un lugar fresco, aflojarle la ropa y enfriarlo rápidamente con un baño con agua tibia, no muy fría para evitar bajar la temperatura corporal bruscamente. También recomiendan ofrecer agua a pequeños sorbos, y por supuesto nada de ingesta de alcohol y evitar darle medicamentos. Si presenta vómitos hay que girar de lado para mantener las vías respiratorias libres. Y, por supuesto, llevar a la persona al centro de salud más cercano.