¿Influyen los roles de género en la capacidad de adaptarse de los estudiantes de Enfermería? Un estudio desarrollado por investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha analizado cómo los roles de género influyen en la resiliencia y el afecto positivo de las estudiantes de Enfermería. El proyecto de investigación, publicado en la revista Healthcare y elaborado por Iván Mayor, Guillermo Moreno, Alfonso Meneses, Patricia Martín, Marta M. Hernández, Antonio G. Moreno y Leyre Rodríguez, concluye que las creencias y actitudes de las estudiantes relacionadas con su propio género pueden afectar a la capacidad de afrontar dificultades y mantener una actitud positiva.

«Los roles de género son un conjunto de expectativas, normas y comportamientos que una sociedad asigna a las personas en función de su género. Estas normas suelen basarse en creencias culturales y pueden influir en la forma en que las personas piensan, sienten y actúan en distintos ámbitos de la vida como el trabajo, la familia o las relaciones personales. Hoy en día hay más géneros definidos, andrógino que es mezcla de masculino y femenino o indiferenciado, personas que no se sienten identificadas con ningún género, e incluso teorías genderqueer que han ampliado las fronteras del género, ofreciendo un amplio espectro de expresión», informan los investigadores del estudio.

El estudio demuestra que las estudiantes que participaban, todas ellas mujeres, presentaban creencias, expectativas y comportamientos asociados al género masculino experimentaban mayor capacidad de adaptación y ánimo positivo, frente a aquellas que se identificaban con un rol más femenino o con roles andróginos o indiferenciados. Un efecto totalmente independiente del nivel de madurez o de formación de las encuestadas, pues los resultados eran los mismos en estudiantes de primero y cuarto de carrera. «Esto sugiere que las expectativas, creencias y comportamientos de las estudiantes relacionados con su género influyen en su bienestar emocional y son independientes de otros factores», explican los investigadores.

«Este hallazgo es relevante porque la enfermería es una profesión emocionalmente demandante. Las enfermeras enfrentan estrés constante y situaciones difíciles, por lo que la resiliencia es crucial para su bienestar y desempeño profesional. Si las estudiantes internalizan creencias que las hacen sentir menos capaces de afrontar desafíos, su desempeño y bienestar pueden verse afectados. Por ello, es fundamental incorporar en la formación de enfermería estrategias que promuevan una mayor resiliencia y desafíen estereotipos de género que puedan ser perjudiciales», sigue el grupo de expertos.

Este proyecto puede ayudar a mejorar los planes de estudio de la formación en Enfermería, tornándolos hacia estrategias que fortalezcan la resiliencia que reduzcan el impacto de creencias limitantes sobre el género. «Esto permitiría reducir la aparición de problemas de salud mental como los trastornos de ansiedad y depresión que, además, son más frecuentes en mujeres. Por otro lado, estos resultados abren la puerta a futuras investigaciones que analicen cómo estos factores influyen en otros ámbitos de la salud mental de las enfermeras y propongan medidas de prevención eficaces», concluyen.