ÁNGEL M. GREGORIS.- Una treintena de espectáculos avalan la calidad y la fama del Cirque du Soleil, el mayor show circense del mundo, que cuenta con varios tours en activo a lo largo y ancho de todos los continentes, así como varios puntos fijos en Las Vegas, Nueva York, Orlando, Riviera Maya y muy pronto en Berlín. En España, por ejemplo, en estas fechas estarán en Barcelona, Madrid, Pamplona… y a partir de enero en Sevilla, Zaragoza y Valencia, entre otros. Un montaje como este, que mueve consigo a centenares de trabajadores, entre artistas y personal logístico, necesita, indudablemente, apoyo sanitario. Para hacerse una idea, se necesitan mínimo 20.000 metros cuadrados para poder albergar este montaje.
Sergio Martos sabe muy bien lo que significa esto porque lleva siete años trabajando como enfermero en el circo. Nacido en Barcelona, estuvo trabajando diez años allí en un centro de salud, en hospitales y en empresas haciendo revisiones laborales. En 2012 surgió esta oportunidad y no dudó en embarcarse en ella. Durante este tiempo ha pasado por el espectáculo Corteo, Amaluna, Varekai y Totem, con los que ha viajado por más de 50 países. “Es muy divertido, no tiene nada que ver con un hospital, es muy diferente; otro tipo de enfermería, que tiene que estar las 24 horas”, destaca Sergio. Él mismo cuenta que el circo es un lugar cardioprotegido, que tiene 6 desfibriladores repartidos por todo su perímetro.
Sergio Martos, enfermero del circo, con una compañera en el stand de merchandising
Dentro del marco legal en cada ciudad o países que visita el circo, es necesario el respaldo de empresas sanitarias y de un personal local para poder comunicarse en su misma lengua, pero él es, por decirlo de alguna manera, el enfermero titular del espectáculo. “Sobre todo estoy por el público que acude a las representaciones, pero muchas veces los artistas y el personal del circo también necesitan cuidados y es muy gratificante estar con ellos y ver su evolución”, explica.
Además de dolencias puntuales, desde la enfermería se hacen cursos y algunos talleres como los de Reanimación Cardiopulmonar (RCP). Y durante estos siete años son muchas las anécdotas que recuerda. “Hay una persona con diabetes, que es la que más se acerca a ti porque debemos tenerla más controlada. También hay algunas alergias, pero el resto no tenemos un cuidado muy exhaustivo porque no lo necesitan”, afirma el enfermero. Uno de los casos que más recuerda les ocurrió en Port Aventura cuando tuvieron que sacar muy rápido a una persona porque le dio un ataque de epilepsia en el intermedio del espectáculo; y una chica en Málaga, que estaba embarazada y empezó a tener contracciones cada minuto.
En general, las tareas de enfermería en el circo se pueden resumir en la elaboración del plan de cuidados, seguimiento y control de las personas, participación en la confección de planes de seguridad laboral y realización de acciones encaminadas a mantener la vigilancia de la salud.
Sergio cuenta que el valor que tiene la enfermería en España no lo tiene en otros muchos países. “En España es algo excepcional porque no en todos los países traen enfermeras tan formadas. En muchas ciudades europeas es un técnico, un auxiliar o incluso un estudiante de medicina quien da el apoyo sanitario. Lo de las enfermeras es algo muy español”, comenta Sergio.
Para él, lo mejor de este trabajo es estar con la gente, ver la evolución y vivir el día a día con ellos. “Es gratificante ver que vienen a ti y que no quieren que los trate otra persona. Se nota mucho la formación que tenemos los españoles, comparando con el resto de los países. La gente que viene con nosotros del equipo, cocina, bares, taquillas, acomodación… siempre me dicen que cuando estoy de vacaciones o tengo días libres se nota porque rápido mandan a todo el mundo al hospital. Nosotros siempre intentamos solucionarlo todo antes de ir al hospital o centro sanitario”, asevera.
El enfermero también explica que la empresa tiene un programa de primeros auxilios avanzado, que cualquier trabajador puede optar a realizarlo. “En nuestra gira, tenemos 30 personas que forman parte del programa, personas que podrían ayudar si en algún momento se les necesita”, puntualiza Sergio.
