ÁNGEL M. GREGORIS.- Un estudio publicado en el International Journal of Cancer sugiere que sustituir el consumo de carne roja por el de ave protege a la mujer contra el riesgo de cáncer de mama. Tal y como destacan, se analizó información sobre el consumo de diferentes tipos de carne y prácticas de cocción de 42.012 mujeres durante un promedio de 7,6 años.
Durante el seguimiento se diagnosticaron 1.536 cánceres de mama invasivos y el aumento del consumo de carne roja se asoció con un mayor riesgo de cáncer de mama invasivo. Así, las mujeres que consumían más carne de este tipo tuvieron un 23% más de riesgo en comparación con aquellas que lo hacían menos. Por el contrario, el aumento de consumo de carne de ave se asoció con menos riesgo de sufrir cáncer de mama invasivo, ya que aquellas que consumían más, tenían un riesgo 15% más bajo. Además, también se redujo en aquellas mujeres que sustituyeron la carne roja por la de ave, pero no se observaron diferencias en cuanto a la manera de cocinarla.
“La carne roja ha sido identificada como un probable carcinógeno y nuestro estudio agrega evidencia adicional de que su consumo puede estar asociado con el riesgo de cáncer de mama, mientras que la carne de ave se asocia con menor riesgo”, afirma el autor principal Dale P. Sandler, del Instituto Nacional de Ciencias de Salud Ambiental (EE.UU.). Aun así, puntualiza que “si bien no está claro el mecanismo a través del cual el consumo de aves de corral disminuye el riesgo de cáncer, el estudio proporciona evidencia de que sustituir la carne roja por esta otra puede ser un cambio simple que ayuda mucho”.