DAVID RUIPÉREZ.- Los profesionales del área de hospitalización del Hospital del Henares de Coslada (Madrid) han superado ese momento en el que la información sobre las constantes del paciente se anotaba en un papel. La transmisión entre profesionales distintos -y a lo largo de los sucesivos turnos y guardias- de parámetros clave para evaluar la evolución del paciente se hace mediante un sistema informático que permite anticiparse a un posible empeoramiento de la salud de la persona ingresada.
Tras probarse con éxito en el marco del programa de UCI sin paredes del centro madrileño, los profesionales ya lo aplican en unidades de hospitalización con una gran aceptación y satisfacción. La enfermera Pilar Ruiz, supervisora de Calidad del hospital, explica a Diarioenfermro.es que “la escala permite la detección precoz de un agravamiento en el estado del paciente. Mediante un interfaz sencillo, la enfermera introduce los datos de frecuencia cardíaca, tensión arterial sistólica, frecuencia respiratoria, saturación de oxígeno y estado de alerta y esos datos se transmiten vía WiFi y se incorporan a la historia clínica. La experiencia arrancó hace apenas cuatro meses, es pionera en una unidad de hospitalización convencional y es fruto del trabajo conjunto de enfermeros, médicos y por supuesto los informáticos”.
Henares Early Warning Score
El sistema, bautizado como HEWS, Henares Early Warning Score, funciona gracias a un algoritmo que combina los cinco parámetros que comenta Ruiz junto con datos de laboratorio y establece una puntuación y un nivel de alerta y estratificación de la atención a los pacientes en función del nivel de gravedad generándose una alerta y actuación rápida por parte de enfermería y equipos de respuesta médicos. Estos equipos están diseñados para permitir a cualquier persona asistencial alertar a otro miembro y buscar ayuda cuando los signos vitales de un paciente han caído fuera de unos criterios definidos, por tanto, tiene una doble misión de detección precoz o identificación y de alerta. El programa también ayuda a decidir cada cuánto tiempo se deben tomar las constantes al paciente, facilitando la monitorización en función de su situación clínica. De esta manera, según informa el Hospital del Henares, se aumenta la seguridad del paciente y se anticipa cualquier empeoramiento de su salud de una manera objetiva.
El propósito es identificar a aquellos pacientes de alto riesgo en fase temprana para prevenir los eventos adversos graves ya que se ha demostrado en diversos estudios que los sistemas de respuesta rápida hospitalaria reducen la tasa de paro cardiaco y la morbi-mortalidad hospitalaria.
“Sin duda –añade Ruiz- es algo que mejora la comunicación entre los profesionales y permite actuar ante de que aparezcan otros síntomas que revelen una mayor gravedad del paciente”.