ANA MUÑOZ.- Uno de los retos más difíciles para una matrona es transmitir tranquilidad a la futura madre ante la posibilidad de que desarrolle una preeclampsia. La evidencia científica no ha conseguido determinar aún las causas exactas de este trastorno multisistémico que afecta del 2 al 5 por ciento de las mujeres embarazadas y que constituye una de las principales razones de complicaciones durante la segunda mitad del embarazo. Aunque normalmente se asocia a una presión arterial alta y a cantidades mayores de proteína en la orina, lo cierto es que la preeclampsia se suele diagnosticar tarde y, sólo en los casos más graves, puede ser mortal para la madre y para el niño.
Ahora, un equipo de investigadores del Campus de Charité Mitte (Berlin, Alemania) ha llegado a la conclusión de que un sencillo análisis de sangre podría determinar precozmente el riesgo que una madre tiene de desarrollar preeclampsia durante la gestación a una semana vista, y esto es así porque han descubierto de qué manera la relación de dos proteínas juega un papel importante en su desarrollo.
En concreto, los científicos han determinado con exactitud, a partir de una evaluación a más de mil mujeres, un valor de corte para el ratio sérico de las proteínas sFlt-1 y PlGF (por sus siglas en inglés). Esto permitiría descartar con fiabilidad la aparición de preeclampsia en la semana siguiente a la realización de la prueba y predecir el desarrollo de esta alteración y sus complicaciones. Así, un ratio entre sFlt y 1 PlGF igual o inferior a 38 proporciona un valor predictivo negativo (aciertos entre todos los negativos de la prueba) cercano al cien por cien para descartar la preeclampsia en la siguiente semana.
“Este descubrimiento es muy relevante, porque hasta ahora el diagnóstico de la preeclampsia no tenía métodos adecuados, de manera que las complicaciones eran imprevisibles”, asegura Gloria Boal, vocal de la Comisión Nacional de Matronas del Ministerio de Sanidad en representación del Consejo de Enfermería. “Se trata de un hito en Obstetricia porque ayuda a evitar uno de los lastres que han venido poniendo en peligro la vida del feto y de la madre”.
A juicio de Boal, que una simple analítica pueda predecir el riesgo de preeclampsia es muy útil para que ellas, las matronas, puedan paliar la ansiedad de las madres y darles una mejor información. Así, explica, “tanto si la mujer presentara factores que pudieran predecir la preeclampsia como si la descartaran, es fundamental hacer saber a la madre que, en el peor de los casos, el diagnóstico precoz evitará complicaciones graves”.