MARINA VIEIRA.- Pese a lo que generalmente se pueda pensar, un consumo regular de cafeína no tiene efectos nocivos en el ritmo cardiaco. Según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de California en San Francisco (UCSF).  El estudio ha analizado el consumo habitual de productos con cafeína a lo largo de un periodo de doce meses y ha sido publicado en la edición de enero de la publicación que edita la Asociación Americana del Corazón.

“Se deben reconsiderar las recomendaciones clínicas que recomiendan reducir el consumo regular de productos con cafeína para evitar un ritmo cardiaco irregular, además recordamos que alimentos como chocolate, el té o el café, suelen contar con beneficios cardiovasculares” declara Gregory Marcus, autor principal del estudio y director de investigación clínica en el departamento de cardiología de la UCSF. “Teniendo en cuenta nuestro reciente estudio que demuestra que un ritmo acelerado del corazón puede resultar peligroso, este hallazgo tiene gran importancia”, recalca el investigador en el artículo publicado en la Asociación Americana del Corazón.

Una contracción auricular prematura ha demostrado poder acabar en fibrilación auricular, paro cardiaco y muerte. Mientras que un exceso de contracciones ventriculares se ha demostrado que puede producir fallo cardiaco, problemas coronarios y muerte. Ambas anormalidades han sido tradicionalmente relacionadas con el consumo de cafeína a través de diversos estudios y ensayos clínicos, pero estas investigaciones se realizaron hace ya varias décadas y no utilizaron la contracción auricular o la contracción ventricular como resultado principal.

No obstante, el Instituto Americano de Cardiología y la Asociación Americana del Corazón puntualizan que un paciente con una historia grave de contracción ventricular, con síntomas de un aumento de ritmo cardiaco prematuro, debería evitar el consumo de alcohol, nicotina o cafeína, ya que son potenciales factores agravantes.

En su estudio los investigadores  de la UCSF analizaron 1.388 participantes seleccionados aleatoriamente del Instituto Nacional del Corazón y la base de datos del Estudio Cardiovascular de la Salud, formada por 6.000 pacientes, excluyendo aquellos con aceleraciones del corazón persistentes. Todos ellos recibieron un listado donde se especificaba su frecuencia en la ingesta de comidas y una monitorización ambulatoria de 24 horas. Los datos sobre frecuencia en el consumo habitual de café, té o chocolate se determinaron a través de una encuesta.

“Este ha sido el primer estudio de muestras para observar el impacto de la cafeína en el aumento del ritmo cardiaco, como estudios anteriores que se centraban en pacientes de arritmia” declaró uno de los investigadores “para afirmar que los alimentos con cafeína producen arritmia será necesario continuar investigando”.