MARINA VIEIRA.- El aporte de la enfermería en la educación para la salud de pacientes y sanitarios es un hecho conocido por todos. Son quienes más cerca están del paciente y por esta razón su conocimiento es crucial para mejorar la calidad de vida de pacientes y familiares. Javier Campillo, enfermero estomaterapeuta y supervisor de Enfermería de Cirugía y Urología del Hospital Royo Villanova de Zaragoza es consciente de ello y su formación ha ido un punto más allá.
Con el objetivo de concienciar de que la ostomía no es un obstáculo para seguir disfrutando de la vida, el enfermero ha comenzado a impartir formación sobre ostomías a pacientes y sanitarios mientras se imparte una clase de spinning. El enfermero ha comenzado esta iniciativa con el objetivo de demostrar que «ser portador de una ostomía no es sinónimo de sedentarismo», explica. Por esta razón durante una hora pacientes ostomizados y profesionales sanitarios se reúnen fuera del hospital para recibir formación sobre ostomías. El enfermero cree firmemente en que «hay que normalizar la vida de los pacientes ostomizados, y la realización de deporte es clave para que se sientan bien e integrados en la sociedad».
Durante la clase, los asistentes reciben información sanitaria sobre todo lo relacionado con el estoma, «qué es una ostomía, tipos de ostomía, cuidados y principales complicaciones tanto locales como sistémicas», enumera Javier Campillo. De esta manera se crea un ambiente en el que «salud y actividad docente van de la mano». «La realización de deporte es sinónimo de salud y es una parte fundamental en la atención integral de los pacientes ostomizados. Una educación sanitaria temprana reduce esos estigmas y prejuicios que muchas veces hay en algunos pacientes ostomizados. Si el personal sanitario normaliza la realización del deporte como otros aspectos de relaciones sociales, sexualidad o dietas el paciente ostomizado se siente con menos temores y mayor autoestima», argumenta el enfermero estomaterapeuta.
La primera formación de este tipo se impartió el 1 de diciembre en un gimnasio de Zaragoza, pero tal y como explica Campillo, esta iniciativa no va a ser una actividad aislada. Debido a que los resultados fueron más que positivos, el enfermero organizará más actividades como esta en la que formación sanitaria y ejercicio saludable se convierten en uno.
Un Comentario
Gerardo Cabrera
Muy buena idea. En Argentina, existen unos 40 mil ostomizados. Casi todas las instituciones que operan se encuentran con estos pacientes y a diferencia de otros países, no tenemos desde las intituciones, enfermeras formadas para dar respuesta a estos pacientes que tienen una ostomia derivada de varias patologías.
Brasil tiene la especialidad Estomaterapeuta que trata a los ostomizados, a los que tienen ùlceras y a los que hacen cateterismo intermitente. (Para mi ya tendrian que cambiarle el nombre a esta especialidad ya que va mas allá de la ostomia) pero no estamos formando de manera oficial y profesional a nuestros enfermeros, sacando algunas excepciones.
Veamos como en España siguen con la necesidad de crear conciencia pero cómo buscan nuevas alternativas de promoción.