GEMA ROMERO.- Bajo la denominación de “Reclasificación profesional actualizada a Grados Universitarios. ¡Eliminar el grupo A2!, una enfermera del hospital Miguel Servet de Zaragoza, Azahara Contreras Martínez, ha iniciado una petición en la plataforma change.org para recoger firmas que pedir esta modificación.

Tal y como reivindica en su escrito se trata de una reivindicación histórica: después de más de 10 años de aprobado el Plan Bolonia “por el que se extinguieron las antiguas licenciaturas y diplomaturas, todavía el personal sanitario sigue atado a las antiguas categorías funcionariales A1, equivalente a licenciado, y A2, diplomado. Igual pasa en otros sectores como Educación o cualquier otro relacionado con la Administración Pública”.

Sin embargo, hasta la fecha y pese las distintas peticiones realizadas en este sentido, también por parte del Consejo General de Enfermería, “hasta la fecha las diferentes administraciones públicas sigan haciendo oídos sordos a la demanda de iniciar los trámites necesarios para realizar la oportuna reclasificación profesional y reconocer a todos los Grados Universitarios como Grupo A, eliminando por lo tanto los subgrupos A1 y A2 que no tienen ya sentido alguno”, subraya Contreras.

Para esta enfermera, tal y como reconoce a DiarioEnfermero.es “más allá de la diferencia de salario base que ello conlleva, también supone una clara discriminación en otros aspectos como por ejemplo el acceso a puestos directivos, grupos de investigación o convocatorias de acceso a puestos públicos”. Además, para Contreras “es un agravio comparativo con respecto a otras carreras. Hemos evolucionado y podemos hacer especialidades de enfermería que son de 2 años, postgrados y hasta llegar a tener un doctorado, pero no se nos da un valor real”, subraya.

A su juicio las enfermeras “estamos adormecidas y con la cabeza gacha. Son tantos años haciéndonos ver que somos inferiores que lo hemos interiorizado y nos lo hemos llegado a creer”. Por eso pretende “que nos sepamos valorar a nosotras mismas y valoremos todas las capacidades y responsabilidad y riesgos que asumimos en nuestro trabajo día a día. Que lleguemos a unirnos y a luchar por lo que debería ser nuestro por derecho. Que dejemos de hacernos la zancadilla entre nosotras y nos apoyemos por una mejora que es para y por todas. Y, finalmente, dar a conocer a otros colectivos que sufren esta misma discriminación dicha injusticia pues también afecta a muchas carreras que anteriormente eran diplomaturas como por ejemplo los Fisioterapeutas, Maestros, Trabajadores Sociales, Terapeutas Ocupacionales…”

De momento si petición que puede firmar cualquier persona parece estar logrando sus propósitos, pues ya la han firmado más de 3.100 personas.