ÁNGEL M. GREGORIS.- ¿Qué documentación necesito? ¿Cómo me convalidan allí el título? ¿Podré ejercer igual que en España? ¿Tendré problemas con el idioma? ¿Qué cursos tengo que realizar cuando llegue? Estas son sólo algunas de las preguntas que se hacen todos aquellos enfermeros que quieren marcharse a trabajar fuera de España y que ven como un mar de dudas les atrapa antes de partir. Así lo experimentó en 2014 Mariana Muñoz, una enfermera andaluza que decidió irse al Reino Unido porque vio cómo la crisis había mermado el número de contratos que conseguía en España. “Al llegar me encontré un sistema totalmente diferente al nuestro, muy distinto a lo que estaba acostumbrada”, recuerda Mariana. Así es como se le ocurrió la idea de empezar a preparar un dossier que sirviese de ayuda a otros compañeros que quisieran trabajar allí en un futuro. Ahora, cuatro años después, este proyecto se ha materializado en la Guía práctica para la enfermera española en el Reino Unido, un manual que busca facilitar la vida de aquellos profesionales que emigran para buscarse un futuro mejor o, simplemente, para formarse y seguir con su carrera fuera de España.

“En esta guía cuento mi experiencia, doy consejos para elaborar el currículum y saber cómo colegiarte, explico la jerarquía, la rutina de lo que hace una enfermera aquí…”, cuenta. Asimismo, ella considera que es importante el enfoque de la guía porque está escrita con un toque de positividad. “Animo a ser positivo, a quedarse con lo bueno que te ofrece esta experiencia a pesar de las diferencias entre sistemas. Todo esto se puede exprimir para tu currículum profesional y para tu vida personal porque si vienes y desde el principio lo ves todo negativo, no te ayudará a sacarle partido”, cuenta Mariana.

La guía, que puede conseguirse en Amazon, ha sido un trabajo autoeditado por ella y del que está muy orgullosa. “No había ninguna editorial que quisiera hacerlo, pero creo que era necesaria. Ahora la estamos traduciendo y lo venderemos también en inglés”, anuncia.

Ella actualmente trabaja en el Hospital de Cambridge. Echando la vista atrás se acuerda de que tuvo mucha suerte cuando encontró el trabajo porque tuvo ayuda para prepararse la entrevista y los papeles, pero subraya que hay muchos que no lo tienen tan fácil. “Me gustaría volver, pero de momento no tengo fecha a corto plazo. Acabo de promocionar porque aquí las enfermeras se dividen en bandas y he subido una”, comenta, orgullosa.

Después de estos años ya se ha acomodado, pero reconoce que lo que más le costó es ver cómo allí no podía llevar a cabo labores que hacía habitualmente en España. “Para todo hay que hacer un pequeño curso porque les tienes que demostrar las habilidades que tienes, que llevas años haciéndolo y que eres capaz. Por ejemplo, las primeras veces que sacas sangre, coges una vía o pones un catéter, ellos te observan y luego te lo firman. Lo llaman competency pack y es lo que necesitas para guardarte las espaldas en el caso de que pase algo. Esto es algo que choca mucho a la gente y en ocasiones se frustran. Por eso quise ponerlo por escrito porque a mí me hubiese gustado saberlo”, asevera.