GEMA ROMERO.- Antes de las 48 horas de haber sido dado de alta tras su paso por el hospital, un paciente recibe una llamada telefónica de su enfermera de Atención Primaria. No lo ha adivinado, es el nuevo protocolo de alta hospitalaria del Área Integrada de Talavera de la Reina que lleva funcionando un año. Como explica Susana Fernández, subdirectora de enfermería, “el beneficio principal es garantizar la calidad en la continuidad asistencial y la seguridad de esa atención”.
“La garantía de que el programa funcione es que la información llegue lo antes posible a la enfermera referente del centro de salud para que pueda ponerse en contacto con el paciente que ha sido dado de alta”, afirma Fernández. Por ello, desde el hospital hay un listado con todos los pacientes que se envía por correo electrónico a cada zona básica para que cada centro de salud gestione y notifique a cada profesional de referencia qué pacientes suyos han estado ingresados en el hospital de Talavera.
Con esta llamada notifican al paciente que su enfermera sabe que ha estado ingresado en el hospital. Además, le ofrecen la atención y cuidado que precise tras el alta. En caso de necesitar curas, por ejemplo, a la hora de ponerse en contacto visualizan el informe del paciente con toda la información: el diagnóstico, el motivo de ingreso, el momento del alta, y el plan de cuidados enfermeros que precisa. “Antes de llamar, la enfermera ya sabe la necesidad que probablemente va a tener ese paciente. A partir de esa llamada se conciertan la visita o el seguimiento domiciliario, se plantea el plan de cuidados enfermeros, se realiza un diagnóstico y una propuesta de intervención que es lo que van a realizar y a evaluar progresivamente. Ese es el inicio del plan de cuidados, que se personaliza en función de cada persona”, señala Susana Fernández.
Beneficios
Todo ello se registra en la historia clínica electrónica del paciente bajo el “Protocolo de alta hospitalaria”. Es la forma de que todos los profesionales ofrezcan lo mismo, y que todos los pacientes tengan garantizado el acceso a la misma oferta asistencial. “El beneficio principal es garantizar la calidad en la atención y la seguridad de esa atención que se hace”, señala Fernández. De esta forma se consigue evitar “información que no se transfiere, tratamientos que se inician que al ser dados de alta que no se continúan de la misma manera, información que se da al paciente que este no es capaz de reproducir… “. Pero también –continúa la subdirectora de Talavera- como beneficios secundarios se facilita la comunicación, la cercanía al paciente, sobre todo en pacientes que no son habituales de la consulta”.
En el año que llevan trabajando de esta forma, la experiencia es muy positiva. “Hay muchos pacientes que se sorprenden de que les llamen. Dejas de ser un paciente más para ser el paciente de Ana, la enfermera que me va a cuidar, que sabe lo que me ha pasado, que se anticipa a mis necesidades. El que la enfermera ya lo sepa les da mucha tranquilidad”, sostiene Susana Fernández.
Para el Área Integrada de Talavera de la Reina es la mejor forma de evitar complicaciones, reingresos innecesarios, a la vez que resuelven las dudas e incertidumbres que tienen los pacientes recién dados de alta.