IRENE BALLESTEROS.- Una de las mayores amenazas para la salud a las que se enfrenta la humanidad en el Siglo XXI son las resistencias antimicrobianas. En 2019 fallecieron en todo el mundo 1,27 millones de personas por infecciones de este tipo, y las previsiones no son mejores, ya que para 2050 se pronostica que esta cifra se podría multiplicar por más de diez veces. en este contexto, el concepto ‘One Health’, discutido en el II Seminario de la compañía biofarmacéutica MSD y la Plataforma One Health en España, bajo el lema «Un mundo, una salud», trata de encontrar soluciones a esta problemática.
Para arrancar en este concepto, lo primero es la concienciación de todos los profesionales, «precisamente el concepto One Health trata de encontrar soluciones, desde el punto de vista de las actuaciones en los animales, en los humanos y en el medio ambiente. La Unión Europea (UE) ha establecido un recordatorio de lo que son las acciones que están incluidas en los planes de lucha frente a las resistencias y ahí tenemos todas unas líneas de actuación, que empiezan desde conocer cuál es la situación, haciendo estudios de vigilancia; de consumo de antimicrobianos; de cómo van las tendencias de las resistencias a los antimicrobianos, y luego buscar soluciones innovadoras, que puede ser el descubrimiento y mejor utilización de los antibióticos que tenemos ahora. Algunas acciones, como la fagoterapia, acciones en la utilización de vacunas frente a los microorganismos multirresistentes… Y eso afecta tanto animales como a los humanos, y por lo tanto esas acciones tienen que estar coordinadas», explica Rafael Cantón, jefe del Servicio de Microbiología del Hospital Ramón y Cajal, de Madrid.
Precisamente, es esa coordinación y trabajo en equipo la que se necesita para transmitir estos conocimientos entre los pacientes, que son quienes consumen antibióticos, «fármacos que debemos preservar para el futuro y que, precisamente la propia utilización de antimicrobianos es lo que genera esas resistencias. Si empleamos demasiados antibióticos vamos a crear una selección de bacterias resistentes y eso es lo que ha hecho crear esta decadente situación», continúa Cantón.
Vacunación
Como parte del enfoque One Health, las estrategias de prevención e inmunización, tanto humana como animal, son indispensables para prevenir y controlar muchas enfermedades emergentes. Aquí, la vacunación está considerada como una estrategia integral. «Es una de las soluciones más importantes porque consigue muchas cosas, la primera, evitar la infección. Si evitamos la infección ya no hacen falta antibióticos. También con la vacunación frente a enfermedades víricas muchas veces conseguimos evitar que tengamos una prescripción de antibiótico que no haría falta, porque estamos ante una enfermedad vírica, pero que, ante una posible complicación o simplemente por no tener un diagnóstico etiológico, se prescribe antibiótico de forma incorrecta, entonces con la vacunación de la gripe ahorramos hasta un 40% de las prescripciones de antibióticos», expone Jaime Pérez, presidente de la Asociación Española de Vacunología. Las vacunas también consiguen, «cuando tenemos vacunas eficaces frente a determinadas bacterias, lo que hace es evitar determinadas resistencias. Por ejemplo, la introducción de la primera vacuna neumocócica conjugada en EE.UU. consiguió una reducción de más del 80% de las resistencias antibióticas del neumococo. Es decir, mediante tres vías, la primera, evitar la infección y, por lo tanto, evitar la resistencia, mediante el uso de antibióticos incorrectos, evitando muchas enfermedades víricas y, al mismo tiempo, contra patógenos que ya han creado resistencias, consigue eliminarlas o disminuirlas de forma muy importante», sigue el presidente de la Asociación de Vacunología.
En vacunación la enfermería es líder, sin embargo, todavía queda mucho camino por recorrer en cuanto a formación y trabajo holístico, donde la salud humana, animal y el medio ambiente formen una única salud global. «La enfermera como cuidadora de cuidados de asistencia continuada al paciente es un elemento clave en la profesión sanitaria, pero creo que es una cuestión que tenemos que ir incorporando en nuestra práctica y vida diaria. Desde la Asociación de Vacunología, creamos una vocalía One Health y ahora uno de nuestros objetivos y grupos de trabajo es la resistencia antibiótica, y uno de nuestro objetivos y líneas de actuación es precisamente One Health. Lo tenemos que ir incorporando, no es que aquí faltemos, porque hay profesionales que estamos en el mundo de la salud humana, pero sí que es verdad que nos tenemos que acostumbrar a que lo tenemos que incorporar y que en este mundo de One Health somos una parte más y no somos los únicos protagonistas. Somos muchos trabajando por un único objetivo, en principio, hemos trabajado mucho más con la salud humana, pero que tenemos que darnos cuenta que está muy interrelacionada y que solamente desde una perspectiva holística vamos a conseguir mejorar la salud total de nuestros pacientes», expone Pérez.
Concienciación
Para trabajar en el concepto One Health es indispensable hacer una labor de formación que termine por concienciar a la población. «Una de las cuestiones importantes, que parece menor, es, por ejemplo, el hecho de que un paciente inmunodeprimido tiene que vacunarse él, vacunar a las personas que viven con él y vacunar también a las mascotas que conviven con él. Todos tenemos que vacunar a nuestras mascotas, pero para este tipo de pacientes es mucho más necesario. Es una cuestión de ir incorporando poco a poco. Lo primero de tu One Health es tu alimentación, el animal que convive contigo, pero no solo eso, es mucho más«, concluye el presidente de la Asociación Española de Vacunología.